La aromaterapia es una disciplina terapéutica que utiliza aceites esenciales, extractos líquidos y concentrados derivados de plantas aromáticas para promover la salud. Estos aceites contienen moléculas activas que pueden ser beneficiosas en la dosis correcta y con una toxicidad mínima.
En el contexto de pediatría, la aromaterapia se utiliza de manera segura y efectiva en dos vías principales: tópica e inhalatoria.
Aceites esenciales por vía tópica
En niños menores de 6 años, no se aplican aceites esenciales puros en la piel. En su lugar, se prepara una mezcla con aceite esencial y aceite vegetal para mejorar la absorción y prevenir complicaciones. La dosis varía según la edad y se aplica alrededor de 3 veces al día.
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0 a 12 meses: 1-2 gotas de aceite esencial + abundante aceite vegetal (al menos 8-9 gotas).
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12-30 meses: 1-2 gotas de aceite esencial + 7-8 gotas de aceite vegetal.
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30 meses – 6 años: 3-4 gotas de aceite esencial + 6-7 gotas de aceite vegetal.
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6-14 años: Se puede aplicar puro o diluido, según el aceite esencial.
Aceites esenciales por vía inhalatoria
La vía inhalatoria es rápida y efectiva, ya que los aceites esenciales llegan al sistema nervioso directamente sin pasar por el torrente sanguíneo. Algunos usos incluyen:
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Difusión atmosférica: Utilizar 3-4 gotas en un difusor durante 15-30 minutos antes de que el niño entre en la habitación. Por ejemplo, aceite de mandarina para relajar y mejorar el sueño.
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Baño: Añadir 3 gotas en el baño del bebé o 8 gotas en la bañera normal, emulsionadas con un gel neutro antes de entrar. Por ejemplo, aceite de lavanda para calmar y relajar al bebé.
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Pañuelo o muñeco: Impregnar un pañuelo o muñeco con 2-3 gotas de aceite esencial para aprovechar su aroma. Por ejemplo, aceite de limón para evitar mareos en viajes.
Precauciones y consejos
Nunca autoadministrar aceites esenciales a niños sin la recomendación de un profesional de la salud, ya que, a pesar de su apariencia inocua, pueden tener complicaciones graves debido a la procedencia y composición de los aceites.
Respetar y no superar las dosis indicadas es crucial, ya que los bebés son sensibles y las complicaciones pueden surgir fácilmente.
Siempre busca el consejo de un farmacéutico u otro profesional de la salud antes de utilizar aromaterapia en pediatría.
En resumen, la aromaterapia puede ser beneficiosa en el cuidado de la salud de los niños, pero se debe utilizar con precaución y siguiendo las indicaciones adecuadas para garantizar la seguridad y eficacia en su aplicación.
